Muchas empresas industriales no cuentan con planos actualizados de las piezas que fabrican o necesitan, e incluso algunas no han tenido nunca planos de ninguna clase. Para éstas, y otras muchas empresas, la Ingeniería Inversa puede ser una buena solución.
¿Qué es la Ingeniería Inversa?
La Ingeniería Inversa está definida en el Military Handbook MIL-HDBK-115 (ME) del ejército de los Estados Unidos como el “proceso de duplicación de un ítem funcional y dimensionalmente mediante su exámen físico y la medición de las piezas que lo componen para desarrollar los datos técnicos (características físicas y materiales) necesarias para su adquisición competitiva”.
Dicho de una forma más simple, la Ingeniería Inversa es el proceso de creación del dibujo de una pieza midiendo una pieza ya existente para determinar sus dimensiones y tolerancias necesarias, cuando no existen especificaciones formales sobre la misma.
El desarrollo de las tolerancias, a menudo el aspecto más difícil del proceso de Ingeniería Inversa, se puede lograr solamente a través de una comprensión profunda de la pieza y de sus aplicaciones.
Un poco de historia
La Ingeniería Inversa es una rama de la ingeniería relativamente reciente, ya que sus orígenes se remontan a la Segunda Guerra Mundial.
Cuando alguno de los dos bandos en conflicto capturaba maquinaria o equipo militar del otro bando, analizaban hasta el más mínimo detalle el equipo capturado al enemigo, con el objetivo de encontrar fallas o puntos débiles que les brindaran una cierta ventaja, así como para intentar incorporar las mejoras técnicas o de diseño halladas en dichos equipos.
¿Cuándo utilizar la Ingeniería Inversa?
La Ingeniería Inversa es un proceso adecuado en las siguientes situaciones:
- Se ha fabricado un modelo físico de un producto, pero no existen planos. Por ejemplo, cuando los archivos han sido destruidos por un desastre o son piezas que provienen de una fuente indocumentada.
- Se han creado los planos, pero al crear los prototipos se han modificado las especificaciones y no se han documentado.
- Piezas gastadas o rotas que deben ser reemplazadas, para las cuales no hay planos.
- Se introduce un sistema CAD en la empresa, y todos los productos existentes se deben cargar en el nuevo sistema.
También la Ingeniería Inversa se utiliza habitualmente en el proceso de rediseño de productos, así como en el desarrollo o de nuevos. En algunos casos puede resultar más fácil desarrollar nuevos planos de un producto existente y modificarlo con un sistema CAD que crear nuevos planos desde cero. Esto es especialmente cierto en el caso de piezas con formas y topografías muy complejas.
Herramientas y tecnologías
La Ingeniería Inversa es hoy más fácil que nunca, ya que existen un número creciente de herramientas y tecnologías, fácilmente integrables en los sistemas CAD y CAM. Generalmente, la complejidad de la pieza que está siendo diseñada por Ingeniería Inversa determinará el tipo de equipo y software a utilizar.
Las técnicas de Ingeniería Inversa pueden ser tan básicas como la medición manual directa, o tan avanzadas como el uso de láser de última generación y sistemas digitales de escaneo mediante luz.
A modo de ejemplo del uso de herramientas, existe escáneres portátiles ahora que pueden digitalizar las superficies en 3-D, esté donde esté la pieza, introduciendo la información en sistemas CAD remotos en tiempo real.
Importancia de la formación
A pesar de todas sus aplicaciones, es asombroso ver que la Ingeniería Inversa NO sea una habilidad generalmente enseñada en cursos universitarios técnicos, más aún teniendo en cuenta que es una herramienta de indudable valor para los ingenieros de diseño.
¿Y porque es esto importante? Porque una gran cantidad de aprendizaje práctico sobre tecnologías, objetos y sistemas puede tener lugar a través de la Ingeniería Inversa. Al analizar la estructura y la función de un dispositivo o componente, los ingenieros pueden mejorar más fácilmente los diseños anteriores.
Fuente: kuzudecoletaje.es
Deja una respuesta